Este es un té auténticamente raro, ya que el Bian Xiao Zhuan (ladrillo de Bian Xiao Cha) en sí es un término del pasado, hoy en día, ninguna fábrica sigue produciendo Bian Xiao Zhuan.
 
Después de la producción en la famosa Fábrica de Menghai, nuestro 1996 Bian Xiao Zhuan se ha envejecido muy bien en un almacenamiento adecuado en seco, 14 años en Kunming y luego 11 años en Shanghái. Las hebras están bien oxidadas de forma natural, en un estado carbonizado hasta cierto punto, aportando una textura del licor extremadamente fina y suave que nunca se encuentra en ningún Puerh Cocido/Shou más joven oxidado artificialmente durante el proceso de fermentación, de modo que incluso no se siente realmente el acto de tragar, el licor simplemente se desliza por la garganta. A diferencia de los Puerh Cocido/Shou jóvenes de fermentación profunda, que suelen traer un licor oscuro y opaco con sabores poco refinados, el licor de este té es adecuadamente transparente, brillante y espeso, junto con un aroma del añejamiento muy limpio, unas notas agradables a arroz glutinoso, a madera húmeda... unos toques muy sutiles a cuero viejo y a tabaco, además un dulzor cálido. Todo ello se debe a la propiedad de Bian Xiao Cha, al estar elaborado con una cosecha madura, que contiene más sustancias gustativas que las hojas tiernas, por lo que ha podido desarrollar un sabor tan complejo a lo largo de los 25 años de envejecimiento.
 
¿Qué es Bian Xiao Cha?
 
Desde la dinastía Tang, en el siglo VIII, el té empezó a ser un artículo importante en el intercambio de mercancías entre China central y el Tíbet. En la ruta de los caballos del té, el gobierno central exportaba té a cambio de caballos. Durante más de mil años, el té que se vendía a las remotas tierras fronterizas del noroeste y suroeste se consideraba una mercancía monopolizada, igual que la sal. En ciertas épocas incluso se prohibía comerciar con dinero, sólo se permitía el trueque. Hasta 1984, el té seguía siendo uno de los suministros del sistema de economía planificada de China, e incluso desde que el gobierno abrió el mercado del té al libre comercio en 1984, los tés que se vendían específicamente a las zonas fronterizas siguieron estando controlados durante muchos años, aquellos, mayormente Puerh, Heicha y unos pocos tés negros, son el Bian Xiao Cha, literalmente, "té vendido a la tierra fronteriza". Los Bian Xiao Cha se elaboran principalmente con material de grados más bajos y contienen hojas maduras y tallos, ya que su uso principal es para preparar té con leche o con mantequilla que consumen las minorías de las zonas remotas.